Me fui nutriendo, aprendiendo de la medicina tradicional, asistiendo a terapias, medicina «alternativa», leyendo libros, yoga… ¡El resultado final fue encontrar mis pasos y mi camino!

Este proceso, resultó siendo tan transformador que en el 2015 comprendí que traía consigo consejo y misión de vida. Decidí emprender un viaje aún más profundo de autoconocimiento. Acompañado por mujeres que me fueron inspirando; fue durante este proceso que se afirmó mí voluntad de acompañar a otras mujeres. Por lo cual doy inicio a investigar, estudiar y formarme. 

Luego de una gran trayectoria y experiencia en el acompañamiento, en enero del 2021 junto a mi pareja consolidamos y co-creamos la escuela, tal cual la estas conociendo ahora. 

Tras estos años de dedicación y conciencia. Nuestra escuela ha logrado acompañar y cuidar la salud femenina de muchísimas mujeres desde un enfoque integral. Que abarca nuestra experiencia personal, que ha sido todo un camino de huesos, sangre y sudor, de aprendizaje y así mismo con un enfoque formativo.

Nuestra salud es un asunto vital y por eso he dedicado gran parte de mi vida a estudiar sobre el cuidado del cuerpo, las emociones, la historia, la vida, el espíritu e incluso la mortuoria. Estoy convencida de que la fisiología y la biología (tanto física como espiritual), son determinantes para interpretar el cuerpo como un territorio que necesita ser observado, escuchado y explorado, pero siempre desde el acompañamiento responsable.

Nuestra escuela tiene un enfoque integral desde la evidencia científica, el enfoque de género, la medicina, la fisiología, la nutrición, la psiconeuroimnunología, que se unifica con los saberes tradicionales, la medicina ancestral y la sabiduría herbal. «Dándole voz y lugar desde luego a las emociones y a nuestro espíritu»